Imagínate llegar a una zona en donde estarás rodeado por paredes de roca rojiza, cuya altura pueden llegar a sobrepasar los 150 metros, mientras caminas por tierra roja, la cual alguna vez fue pisada por dinosaurios hace unos 250 millones de años. Básicamente, eso es Talampaya en una sola oración.
Una descripción así podría ser suficiente para dejarte asombrado, pero la verdad es que no es nada si se le compara a estar en el Talampaya y ver todo en persona.
Debo confesar que cuando partí hacia Argentina, no tenía ningún plan concreto de visitar La Rioja, provincia en donde se encuentra este parque. Es más, no tenía la menor idea de que hubiera algo parecido a Talampaya (Incluso muchos argentinos no saben de su existencia). Fue con el pasar de los días que varios blogueros argentinos me comentaron sobre este atractivo, por lo que investigué más y decidí conocerlo.
Empiezo por decir que el parque es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, y con todas las de la ley, se merece semejante galardón. El impactante paisaje, adornado con montañas y acantilados de diferentes tamaños y formas, cuyas tonalidades rojizas cambian de color a medida que el sol cambia de posición.
No sólo los dinosaurios fueron los únicos habitantes del parque. También los Diaguitas, indígenas que poblaron la zona entre los siglos III y X, dejaron sus huellas plasmadas en forma de morteros y dibujos grabados en piedra. En la actualidad, son los zorros, guanacos y cóndores los que más destacan en el área.
Tomó alrededor de 4 horas el trayecto de atravesar el cañón de Talampaya, detenernos a merendar, visitar la formación rocosa conocida como El Monje y luego realizar una caminata por el sendero de Los Cajones.
Mientras pasó el tiempo, el ambiente lo llegué a sentir un poco pesado gracias al sofocante calor que se dejaba sentir después del mediodía (la cual fácilmente podría estar en los 38°).
El recorrido lo hicimos a bordo de un camión 4×4 que avanza por el cauce de un río seco. Un detalle interesante es que estos camiones tienen escotillas, lo que permite sacar parte de tu cuerpo y así tener una visibilidad completa del paseo.
Que llevar
- Empezando por una mochila pequeña en donde meter tus cosas.
- Tu cámara fotográfica y con las baterías bien cargadas (no querrás filmar/fotografiar cada rincón del parque y quedarte sin pilas).
- Gafas de sol.
- Protector solar.
- Agua, como mínimo 1 litro.
- Si vas durante los meses de invierno (junio a septiembre), un abrigo.
- Una gorra, aunque si puedes irte con un gorro de explorador, mucho mejor.
- Un repelente para insectos. Esto dependerá de la temporada en que vayas. No creo que pase en invierno, pero en mi caso, fui en noviembre (cuando es primavera) y era asediado constantemente por moscas pequeñas.
Otros datos importantes
- No hay ningún cajero automático, por lo que procura llevar sólo efectivo para pagar.
- No es permitido hacer Talampaya por tu cuenta. Siempre irás acompañado de un guía.
- La entrada al parque y la excursión son precios separados.
- El Talampaya tiene varios circuitos para recorrerlo. Lo que muchos hacen es acampar en el área cercana al centro operativo, cuyo complejo tiene facilidades como baños y un restaurante.
- Si no te atrae la idea de acampar, puedes conseguir alojamiento en Villa Unión, poblado que está a un poco más de 50km de distancia.
(No dudes en revisar la página oficial para que averigües toda la información detallada en cuanto a historia del sitio, precios, horarios, circuitos, etc.)
¡A disfrutar!
La mayoría de los viajeros reconocen Argentina por atractivos de gran popularidad mundial como lo son las Cataratas del Iguazú, la ciudad de Buenos Aires o el Glaciar Perito Moreno, pero bien el Talampaya podría ser parte de los principales destinos argentinos que toda persona debería ver antes de morir (más drástico no pudo sonar, pero es cierto 😀 ).
Ahora que has leído este post, ya no tienes excusa alguna para ir a La Rioja y que nadie te eche cuento cuando disfrutes el Talampaya.
Video de mi excursión por Talampaya
El viaje por Talampaya fue organizado por la Secretaría de Turismo de la Provincia de La Rioja, quienes fueron muy amables también en planificarme una excursión a la reserva provincial Laguna Brava (excursión de la cual hablaré en un próximo post).
Qué bueno que hayas podido conocer este parque! A mi, en lo personal, me hizo sentir que estaba en Marte la primera vez que estuve (tenía alrededor de 10 años). Es verdad lo que mencionás, es un lugar único en el mundo, y sin embargo no es un destino famoso, ni siquiera para nosotros mismos (argentinos). De hecho, no conozco a casi nadie acá en Buenos Aires que sepa de su existencia, ya que La Rioja no es una provincia considerada como destino turístico. Muchas gracias por escribir un post sobre este hermoso rincón de mi país!
Ciertamente que La Rioja la considero una de las mejores provincias de Argentina 😉