La bulliciosa ciudad de Rosario se enclava en el centro de Argentina, convirtiéndose en un lugar de paso obligatorio para aquellos que se desplazan a través del país, además de ser la puerta de entrada y salida de gran parte del comercio con el exterior gracias a su puerto enclavado sobre el río Paraná.
Se trata de una ciudad moderna y cosmopolita, la de mayor densidad poblacional del país y que ha dejado atrás los difíciles momentos que asolaron la economía de la ciudad tras la crisis de 2001 gracias al crecimiento de la exportaciones agrícolas y a la llegada de las inversiones, especialmente en el sector de la construcción.
Sitios a visitar en Rosario
Uno de los mayores atractivos de la ciudad es, sin duda, el centro urbano que parte de la Plaza Veinticinco de Mayo. En frente de la misma se ubica de manera imponente la Basílica Catedral de Nuestra Señora del Rosario, de la que el viajero no debe pasar la oportunidad de contemplar el magnífico altar realizado con mármol italiano.
El Palacio de los Leones, que es la sede de la municipalidad, fue construida en estilo neo-renacentista y rematada con una pareja de leones que custodian la entrada.
Desde la mencionada plaza es posible adentrarse por el Pasaje Juramento que lleva a uno de los lugares que es símbolo de la ciudad, el denominado Monumento Histórico Nacional a la Bandera. Este sitio conmemora el lugar donde se izó por primera vez la bandera argentina por su creador, el general Manuel Belgrano.
Este monumento no solo es un espectacular ejemplo de arquitectura y escultura del siglo XX, sino que incluye una majestuosa torre de 70 metros de altura que al estar provista de mirador permite observar la ciudad desde las alturas, dando la oportunidad de disfrutar de un maravilloso atardecer e inmortalizar el skyline de Rosario.
El monumento también se complementa con el Patio Cívico y el impresionante Propileo, y es el centro de las celebraciones del día de la bandera cada 20 de junio. El parque que rodea el Monumento a la Bandera acoge habitualmente espectáculos gratuitos para disfrutar, a la vez que se pasea, y junto con el Parque de la Independencia forman el pulmón de la ciudad.
En las orillas del Río Paraná no solo se ubica dicho parque sino que son varios los espacios recreativos existentes, entre los que destaca el Parque de España que conmemoró en 1992 el 500 aniversario de la llegada de Cristóbal Colón a América.
Convertido en importante centro cultural, resulta agradable hacer una parada en algunos de los bares y restaurantes a la orilla del río para degustar los platos locales, como parrilladas o pescados sacados del mismo río.
Pero para experimentar el río de forma completa, es muy recomendable aventurarse en algunas de las embarcaciones que recorren el río desde el embarcadero La Fluvial.
Además de poder observar la ciudad desde un ángulo diferente, permite visitar los fascinantes enclaves que se encuentran al otro lado del río. Uno de los destinos favoritos de foráneos y locales son las playas de El Banquito.
Con la llegada del periodo estival, cuando las aguas del río están bajas, éstas permiten disfrutar de una mayor superficie de arena que podrás combinar con un almuerzo o refresco en los paradores, donde se ofrecen sándwiches, carnes y pescados a la parrilla.
Esta zona también tiene un espacio reservado para practicar deportes como el fútbol, voleibol de playa, kitesurf y skimboard. Este último deporte es parecido al surf, pero con una espectacularidad y complejidad mayor.
Si todos estos atractivos con los que cuenta la ciudad te han convencido para visitarla en tus próximas vacaciones, te recomiendo que al planificar tu viaje recurras a portales web de garantías que ofrecen una amplia variedad de hoteles en Rosario que se adaptarán a tu bolsillo y te permitirán conocer este enclave argentino de la manera más cómoda y atractiva.